Neruda, Chile... y a nacer de nuevo

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Por alguna razón que ignoramos, ciertos versos quedan en algún rincón de nuestra memoria para ser recuperados en momentos de angustia y dolor. En mi caso, cuando la fe decae, recurro a unos versos de Pablo Neruda: Estoy muerto, / estoy asesinado; / pero estoy naciendo / con la primavera / porque ha salido el sol. (...)
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Hoy, a una semana del sismo que castigó a Chile, y que aún conmociona con sus réplicas, creo que el mejor abrazo que se le puede dar al pueblo chileno es una voz de aliento en las palabras de Neruda. Vaya pues en el viento y por encima de la cordillera un poema del hombre que vio la luz en Parral, región de El Maule, un 12 de julio de 1904. ¡Y a nacer de nuevo, Chile, porque ésa es la ley de la vida!
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. . . .Silencio

Yo que crecí dentro de un árbol
tendría mucho que decir,
pero aprendí tanto silencio
que tengo mucho que callar
y eso se conoce creciendo
sin otro goce que crecer,
sin más pasión que la substancia,
sin más acción que la inocencia,
y por dentro el tiempo dorado
hasta que la altura lo llama
para convertirlo en naranja.
. . . . . . . . . . . . . . . . . . Pablo Neruda

4 comentarios:

Neogeminis Mónica Frau dijo...

Hermoso homenaje para los hermanos chilenos.


un abrazo!

Mariana Marziali dijo...

Qué buen mensaje, Agustín! Y creo que por esots momentos el mundo entero necesita más mensajes esperanzadores y que llamen a la reflexión. Cariños

Lolita dijo...

El poema es súblime, en la forma y en el fondo. Esboza mucha savia.

Un abrazo.

Unknown dijo...

Ah, Pablo, por su culpa empecé con la poesía...